domingo, 14 de febrero de 2016

HABLAMOS DE LA IRA

Después de un acalorado enfrentamiento reciente con alguien que me importa profundamente  empecé a preguntarme en alto, ¿para qué sirve la ira? ¿Qué función tiene? Realmente ¿se puede controlar? Si pudiera al menos entenderla, tal vez podría aceptar mis sentimientos de ira y dejarlos ir. Así que durante esta semana he estado pensando en hablar de la Ira.  Claro que como la vez pasada hablé de la Pereza se está pareciendo  estas reflexiones a un repaso sobre los pecados capitales.

¿Qué es la ira?

Además de un pecado capital es una emoción, de las denominadas básicas. En diccionario de la Real Academia Española nos da los siguientes significados, veamos:
1. f. Sentimiento de indignación que causa enojo.
2. f. Apetito o deseo de venganza.
3. f. Furia o violencia de los elementos de la naturaleza.
4. f. pl. Repetición de actos de saña, encono o venganza.

Como vemos la relación es con sentimientos negativos. Por lo general provocada por un daño emocional se experimenta como una sensación desagradable que se produce cuando pensamos que hemos sido heridos, maltratados o cuando nos enfrentamos a obstáculos que nos impiden alcanzar los objetivos personales.

La experiencia de la ira es muy variable; con qué frecuencia se produce la ira, la intensidad con la que se siente, y su duración son diferentes para cada persona. Las personas también varían en la facilidad con que se enojan (su umbral de la ira). Algunas personas siempre se están enojando mientras que otros rara vez se sienten enojados. Algunas personas son muy conscientes de su ira, mientras que otros no pueden reconocer la ira cuando se produzca. 

Algunos expertos sugieren que el adulto promedio se enoja aproximadamente una vez al día y se siente molesta o irritada alrededor de tres veces al día. Otros expertos en gestión de la cólera sugieren que enojarse quince veces al día es más probable que un promedio realista. Independientemente de la frecuencia con la que realmente experimentamos la ira, es una emoción común e inevitable.

¿Tiene alguna función la ira?

Si la naturaleza es sabia, podemos decir que la ira tiene que tener alguna utilidad, veamos.

1. La de establecer límites a nuestro alrededor cuando nos sentimos amenazados. Cuando sentimos aunque sea intuitivamente una amenaza  o como cuando estamos siendo maltratados, tendemos a sentir rabia. Esta es una señal interna.
2.  Oculta sensaciones y emociones  con las que no nos sentimos cómodos de mostrar. Muchas veces, cuando una persona está enojado, lo que subyace es culpa, tristeza, miedo, en fin vulnerabilidad.  Estos sentimientos son tan incómodo que la persona prefiere enojarse que mostrarla emoción subyacente. Cuando sienta rabia, una de las primeras preguntas que debe hacerse es: ¿qué emoción estoy tratando de evitar?
3. Actúa como una armadura. La ira mantiene a los otros lejos dándonos cierta protección. Muchas veces esto puede ser un mecanismo de defensa eficaz si necesitamos o queremos cierto espacio parar resolver algo. Los adolescentes usan la ira de esta manera una gran cantidad de darse espacio lejos de una situación que no son capaces de manejar.
4. Nos prepara para la batalla. Como cualquiera que se haya metido en un altercado físico con alguien que le amenaza puede decir, que necesita para darte fuerza tener accesibilidad a la bomba de adrenalina en caso de emergencia. La ira puede aprovechar su poder con el fin de proteger físicamente si está siendo lastimado.
5. Es un detector ya que puede apuntar a los problemas internos no resueltos. Cuando albergamos un sentimiento de ira en el momento que se piensa en alguien en su vida, un tema de su niñez, o un evento futuro que está temiendo, más que probable que tenga algo sin resolver pasando . La petición de un amigo qe nos cuestar decir que no pues no deseamos ayudarle. Uno se siente el resentimiento y la ira hacia su amigo, cuando en realidad es el único que tiene problemas para establecer límites y decir no. O tal vez si sentimos ira cuando pensamos en una relación que hemos dejado, podemos darnos cuenta que necesitamos progresar en poner punto final  para seguir adelante. 

Manejar la Ira

La ira puede ser constructiva o destructiva. Cuando se gestiona bien, la ira o la molestia tiene muy pocas consecuencias perjudiciales para la salud o interpersonales. En sus raíces, la ira es una señal de que algo en su entorno no está bien. Captura su atención y le motiva a tomar medidas para corregir errores y ∕tomar decisiones

1. Detectar tu ira.
Cada uno de nosotros se enoja de vez en cuando y es perfectamente normal. Sin embargo, si en medio de la situación  dices y haces cosas tendentes a la violencia, estas adueñadas por la ira, como el que sufre de una enfermedad. Esa sensación completamente fuera de control que se nota  en las tripas cuando va a tener uno de "esos" momentos , es el signo más  que seguro de su ira puede traspasar el límite. En cuanto detectes que estas subiendo la ira, dale al botón de emergencia.  Detente y piensa si realmente es una amenaza real.

2.  Detente: STOP
En el calor del momento, es fácil decir algo que va a lamentar más tarde. Tómese unos minutos para recoger sus pensamientos antes de decir cualquier cosa - y permitir que otras personas involucradas en la situación de hacer lo mismo.
Controla tu pensamiento y páralo excepto para decirte ”estoy volviéndome loco" "que estoy haciendo" momento en el que me digo CALMA O STOP (PARA)  y además trabajaré un gesto para poner freno físicamente a mis emociones. Un buen gesto de la parada es mantener sus manos en frente de su cara, los dedos hacia arriba, con las palmas hacia afuera desplazando físicamente la ira fuera de nosotros

3.  Dese espacio.
Cuando estás enojado, la última cosa que necesita hacer es mantener ese impulso en la situación que te desborda y lo que hace es escalar su ira. Es muy importante que en este momento usted no trate de hacer frente a la situación que se está haciendo enojar. No se puede resolver un problema en un acceso de ira; es probable que acaba de escalar la situación o crear una nueva capa de problemas a tratar. 

4.  Respire profundamente.
Comience por el control de sus respuestas internas, físicas a la ira. Probable es que su ritmo cardíaco se incrementa, su respiración es rápida, su cara se tersa o se eleva su voz. El primer paso para el control interno es respirar profundamente.
La respiración profunda permite que su cuerpo se llene de oxígeno. Esto detendrá la descarga de adrenalina que inunda su cuerpo cuando se está enojado. Este flujo de oxígeno adicional se relajará su cuerpo, su respiración almeja, disminuir la frecuencia cardíaca, y permitir que su cerebro para reanudar el pensamiento racional.
Tomar una serie de, incluso, respiraciones profundas y lentas. Ponga su mano sobre el estómago y llevar el aire hasta que se encuentre su lugar estómago. Trate de contar o repetir una palabra o frase que calma, tales como "Esto también pasará".

5.  Analizar.
 Tan pronto como usted está pensando claramente, expresar su frustración de una manera firme, pero sin confrontación. Una buena manera de analizar lo sucedido es imaginar que sucedió a otra persona, su hermana, su hermano o un amigo. En cuanto a la situación como un intruso podría ayudarle a ver la verdad. Es posible entender con mayor claridad dónde está su ira vino, o es posible que vea que su reacción fue fuera de toda proporción.

6.  Definir el problema.
Después de haber visto la situación con mayor claridad, es el momento de definir con precisión el problema en las palabras exactas. Ver si se puede llegar a una descripción del problema en una o dos frases. Ponerlo en palabras claras, llanas que indicar exactamente el verdadero problema que provocó su ira.

7.   Resolver.
Una vez que haya declarado el problema, usted puede entonces considerar opciones para resolverlo. Es posible que desee para anotar varias opciones posibles en papel o hablar acerca de las opciones con otro adulto. No hay ninguna razón para que usted pueda tomar decisiones en un vacío. Te garantizo que el problema que se está tratando es muy común y hay un montón de fuentes de soluciones. Usa el lenguaje e imita a las personas que  pueden ser un modelo, habla en voz baja, relaja el cuerpo.

8.   Tomate tu tiempo (un tiempo de espera)
Los tiempos de espera no son sólo para niños. Date las pausas breves durante las horas del día que tienden a ser estresante. Unos pocos momentos de tiempo de silencio pueden ayudar a sentirse mejor preparado para manejar lo que viene sin conseguir irritable o molesto.
Cuando sus destellos del genio, técnicas de relajación ponen a trabajar. Practique los ejercicios de respiración profunda, se imaginan una escena relajante o repetir una palabra o frase que calma, tales como, "Tómalo con calma." Usted también puede escuchar música, escribir en un diario o hacer algunas posturas de yoga - lo que sea necesario para promover la relajación.
Pensando en alto vemos que la ira tiene funciones importante en nuestra vida, claro que estar en manos de la ira aleja a los amigos, compañeros de trabajo y miembros de la familia, además de los problemas de salud que podemos contraer, razones más que suficientes por las que aprender a controlar nuestra ira, en lugar de permitir que nos controle, es un primer paso fundamental para mejorar nuestras relaciones y comenzando a experimentar más alegría y felicidad en nuestras vidas.